Se trata de una opción ideal para cualquier ocasión, se puede personalizar con diferentes bases, coberturas de frutas o incluso chocolate
La tarta de queso Philadelphia es una de las opciones más populares y sencillas para disfrutar de un postre cremoso y delicioso, sin necesidad de encender el horno. Este postre destaca por su textura suave y su sabor equilibrado entre el dulzor y el toque ácido característico del queso crema.
Se trata de una opción ideal para cualquier ocasión, se puede personalizar con diferentes bases, coberturas de frutas o incluso chocolate. A continuación te explicamos cómo hacerla de forma fácil y rápida.
La preparación de esta tarta consiste en una base hecha tradicionalmente de galletas trituradas y mantequilla, sobre la que se vierte una mezcla cremosa de queso Philadelphia, nata y azúcar. Finalmente, se deja reposar en la nevera hasta que solidifique. La mermelada de frutas se encarga de darle el toque final.
El tiempo necesario para hacer esta receta es de 4 horas y 20 minutos. Ahora, solo se necesitan 20 minutos para la preparación. El resto del tiempo solo habrá que mantener la tarta en la nevera
- 200 gramos de galletas tipo María o Digestive.
- 80 gramos de mantequilla derretida.
- 500 gramos de queso crema Philadelphia.
- 200 ml de nata para montar (35% de materia grasa).
- 100 gramos de azúcar glas.
- 6 hojas de gelatina neutra o 10 g de gelatina en polvo.
- 50 ml de leche.
- 200 gramos de mermelada de frutos rojos o del sabor que prefieras.
- A la hora de elaborar esta tarta lo primero que hay que hacer es preparar la base. Para ello, tritura las galletas hasta obtener un polvo fino y mézclalo con la mantequilla derretida. Después extiende esta mezcla en el fondo de un molde desmontable, que debe tener unos 20 centímetros de diámetro, y presiona con una cuchara para compactarla. Cuando esté lista, guárdala en el frigorífico mientras preparas en el relleno.
- Ahora es el momento de hidratar la gelatina. Si usas gelatina en hojas, colócala en agua fría durante 5 minutos. Si es en polvo, disuélvela directamente en los 50 ml de leche caliente hasta que se diluya por completo.
- Con la gelatina ya hidratada, pasa a preparar el relleno. Para ello, mezcla en un bol el queso philadelphia con el azúcar glas hasta obtener una crema homogénea. Seguidamente, monta ligeramente la nata en otro recipiente e incorpórala al queso, mezclando con movimientos envolventes. Añade la gelatina diluida y mezcla bien.
- Llegados a este punto, pasa a montar la tarta. Vierte la mezcla sobre la base de galletas y alisa la superficie con una espátula. Cuando esté lista, guárdala en el frigorífico durante unas cuatro horas.
- Pasado este tiempo, calienta la mermelada para que sea más fluida y viértela sobre la tarta ya cuajada. Extiéndela uniformemente y vuelve a guardarla en el frigorífico durante 30 minutos más.
Con estas cantidades, obtendrás aproximadamente 8 porciones de tamaño mediano.
El valor aproximado de cada porción de esta receta es este:
- Calorías: 320 kcal.
- Grasas: 20 gramos.
- Grasas saturadas: 12 gramos.
- Carbohidratos: 28 gramos.
- Azúcares: 18 gramos.
- Proteínas: 5 gramos.
No obstante, hay que tener en cuenta que el valor nutricional de cada ración puede variar ligeramente según el tamaño y los ingredientes exactos.
La tarta de queso Philadelphia se puede conservar en la nevera durante un periodo de entre cuatro y cinco días. Ahora bien, es importante que esté siempre cubierta para que pueda absorber los olores.