La reciente adquisición de Telefónica Argentina por parte de Telecom ha generado una fuerte controversia en el país a raíz de la posible conformación de un monopolio en el ámbito de las telecomunicaciones. En este contexto, este medio se comunicó con Gustavo López, exvicepresidente del ENACOM, quien alertó que la operación «viola la ley» y podría afectar la competencia en el sector de las telecomunicaciones.
Según Gustavo López, la fusión se plantea en contra de la Ley Argentina Digital y la Ley de Defensa de la Competencia. «El grupo comprador tendrá que explicar ante el ENACOM y Defensa de la Competencia qué medidas tomará para adecuarse a la normativa«, advirtió. Además, señaló que la concentración del mercado alcanzaría entre un 65% y un 70%, superando ampliamente el límite del 40% establecido por la ley.
La involucración tardía del Gobierno
López también criticó la tardanza del Gobierno en reaccionar. «El comunicado oficial llegó tarde. Se sabía desde hace tiempo que esta operación podía ocurrir, pero recién ahora se advierte sobre un posible monopolio«, expresó.
El entrevistado comparó esta situación con las privatizaciones realizadas durante el gobierno de Carlos Menem. «En aquella época, las empresas estatales fueron vendidas con un alto nivel de corrupción. Se pagaron precios muy bajos utilizando bonos de deuda que, en el mercado, valían apenas un 20% de su valor nominal», recordó.
Cuáles son las consecuencias de que se forme un oligopolio
A pesar de que la actual compra es entre privados, López subrayó que el Estado debe intervenir para evitar la cartelización y la formación de oligopolios. «Si no se regula, el tercer operador quedará contra las cuerdas, afectando la competencia y perjudicando a los usuarios«, alertó.
Privatizaciones encubiertas y el rol del Estado
Más allá de la fusión en el sector de telecomunicaciones, el ex vicepresidente del ENACOM denunció intentos del Gobierno de avanzar con privatizaciones solapadas. Citó el caso del Banco Nación, que quedó fuera de la Ley Bases, pero que, mediante un decreto, se abrió al capital privado. «Es una burla al Congreso y a la división de poderes», afirmó.
Asimismo, recordó el caso del Banco Hipotecario, cuya privatización parcial terminó afectando su función original. «Antes otorgaba créditos para la construcción de viviendas; hoy, con el gerenciamiento privado, prácticamente ha dejado de hacerlo«, sostuvo.