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Murió la pareja del exfutbolista Fernando Cáceres al caer de un séptimo piso

La Justicia investiga la muerte de la pareja de Fernando «El Negro» Cáceres, Raquel Candia, quien falleció en la tarde de este lunes, tras caer del séptimo piso del edificio en que vivía con el exfutbolista en la localidad bonaerense de Ramos Mejía.

La mujer de 45 años murió luego de caer al patio interno de un edificio ubicado en la calle Suipacha al 300. Según algunos vecinos del lugar, horas antes de la caída se escucharon gritos en el departamento, al que se habría mudado la pareja el sábado pasado. Además, la policía encontró el hogar «totalmente desordenado» y los testigos afirmaron que la vieron caer.

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La causa está a cargo del fiscal de La Matanza, Carlos Arribas, quien trabaja en el esclarecimiento de los hechos. Cáceres supuestamente era el único presente en el momento de la muerte de Candia. “No descartamos ninguna hipótesis, es muy prematuro. Trabajamos sobre el escenario del hecho. No tenemos nada sobre una tercera persona”, afirmó Arribas a Infobae en las últimas horas de ayer.  

Fernando «El Negro» Cáceres, en silla de ruedas desde hace más de 15 años

Cáceres recibió un disparo en la cabeza en un robo, por lo que perdió el ojo derecho

Cáceres había sido jugador de la Selección argentina en 1993, cuando salió campeón de la Copa América, y en el Mundial de Estados Unidos 1994. También se desempeño en Argentinos Juniors, River y Boca, entre otros equipos. Dos después de retirarse del fútbol profesional, el 1 de noviembre de 2009, el exdefensor circulaba a bordo de su automóvil cuando, al llegar al cruce de las calles Gaona y Falucho, en Ciudadela, fue interceptado por cuatro delincuentes armados. 

Cuando Cáceres quiso dar marcha atrás para esquivar a los ladrones, que se movilizaban en dos Fiat Siena robados, en uno de los cuales llevaban secuestrado a un remisero, uno de ellos disparó a través del parabrisas para robarle el BMW y le dio en la cabeza. Después de una larga internación en el hospital Carrillo lograron salvarle la vida, pero perdió el ojo derecho y se vio obligado a movilizarse en una silla de ruedas. Por el ataque, dos de los asaltantes, apodados «Kuki» y «Chanchi» —de 17 años en ese momento— fueron declarados culpables en el juicio.

LM/ML

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