La novela por la llegada de Adam Bareiro a River duró poco menos de dos meses. Fue acaso la más larga del mercado en todo 2024. Y puede contrastar con la estadía del delantero paraguayo en Núñez, donde firmó contrato el pasado 11 de julio hasta el 31 de diciembre de 2027: el Príncipe, una de las prioridades de Martín Demichelis en la ventana de mediados de 2024, está muy cerca de dejar el bunker del CARP en San Martín de los Andes como ya hicieron Enzo Díaz y Nicolás Fonseca.
Al tanto de que correrá de atrás en la consideración de Marcelo Gallardo de cara a la temporada que arranca a fin de mes, AB analiza propuestas y hay una que está a un sí de distancia para que de un momento a otro deje el dorsal #7 disponible: el Al-Rayyan qatarí acercó una oferta de préstamo con cargo y opción de compra que tiene luz verde de parte de River. Ahora define el delantero, que deberá poner distintas variables en la balanza.
En términos económicos, la opción de jugar en Medio Oriente es claramente satisfactoria, bastante más que las que tuvo hace poco más de una semana para volver a Olimpia primero y para pasar a Nacional de Montevideo después. Pero claro, por otro lado, sabe Adam que un destino tan exótico y bajo en el orden competitivo podría sacarlo de la órbita de una de sus prioridades deportivas que es la selección paraguaya, justo a poco más de un año del próximo Mundial. En ese sentido, desde ya, quedarse en el CARP para jugar poco tampoco lo favorecería.
En eso anduvo la cabeza de Bareiro por estas horas. Un Bareiro que quería seguir en River y tener revancha tras un semestre de adaptación en el que le costó demasiado ponerse al ritmo del equipo: de hecho, el 28/11 pasado, en un comunicado en su Instagram, desmentía una versión sobre una posible salida. Lo cierto es que con escasos 567’ distribuidos en 16 partidos, el delantero no suma ni goles (no convierte, de hecho, desde el 10 de mayo entre CASLA, la Albirroja y River) ni asistencias y tuvo apenas un tiro al arco, al palo ante Huracán.
Lo cierto es que el paraguayo, que este sábado estuvo en el segundo turno de entrenamientos diferenciado con los fisioterapeutas del plantel, quedó muy cerca de salir y así, también, liberar un cupo de extrajero valioso (hoy, aun con la salida de Fonseca, el listado está a tope). Hasta Qatar hay 13.000 kilómetros y apenas un sí de distancia.
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